Hace tres años el Club Murcia Gourmet entregó su premio Mursiya Mezze correspondiente a la edición de 2011 a este restaurante. En plena crisis, La Marimorena demostró entonces que el espíritu de emprender no entiende de crisis cuando hay talento, creatividad, ilusión y ambición de ser los mejores.
La Marimorena representó entonces el concepto de restaurante total. Un espacio gastronómico dónde convivían la tradición y lo contemporáneo, la sencillez y lo complejo, el rigor y la transgresión, la cocina de nuestros abuelos, la de nuestros padres…y por supuesto la nuestra.
Pero cómo dijo la escritora Doris Lessing “el talento es algo corriente. No escasea la inteligencia, sino la constancia”. Y tres años después, La Marimorena no sólo se mantiene, sino que sigue reinventándose cada semana. En sus inicios, se decía que la Marimorena era un restaurante donde cabía el arte y la cultura. Yo creo que hoy podemos decir que La Marimorena es ya arte en si misma. Juana Ruiz – la chef ejecutiva- y su gerente Ruppert García-Arias han creado bajo la denominación “New Tabern” un estilo gastronómico único en nuestra Región.
La Marimorena es como las buenas canciones. Uno siempre quiere volver a escucharla. Porqué uno siempre encuentra un nuevo matiz, una nueva emoción, algo nuevo que se nos escapó la primera vez. Lo mismo ocurre aquí: siempre hay algo nuevo.
http://www.murciagourmet.com/media/imagenes/productos.jpg
Una de las últimas novedades es la tienda take away. Situado en la entrada del restaurante, cualquiera puede comprar aquí un gran surtido de aperitivos, productos gourmet, conservas, vinos, cavas o cualquier plato de la carta del restaurante para llevar a su casa. Todo con el sello de calidad del distribuidor Guerma.
En el fondo creo que esta tienda no deja de ser una nueva estrategia para que vuelvas. Una trampa. Pero, eso si, una deliciosa trampa. ¿Alguien cree de verdad que llevándose los productos podrá cocinar igual que Juana el gazpacho de fresa con sardina, la tosta de queso vellón y queso de la pastora con trufa, la tosta de foie con gelatina de Moscatel, una mini hamburguesa de chato con mostaza pommery, unos rollitos de ternera con ensalada y mostaza de piña, el pastel marimorena, los dedales de bacalao en tempura con parmentier, o la tosta de panceta ibérica con mermelada de violetas, parmesano y avellana…?...Pero ese es precisamente el secreto. Ellos saben que nos gustaría hacerlo. Que lo vamos a intentar. Que en el empeño disfrutaremos y mucho porque tenemos la mejor materia prima y hasta lograremos nuestros propios sabores.
Pero siempre volveremos para intentar seguir desentrañando la piedra filosofal de su cocina. Y vuelta a empezar. Y así hasta el delicioso infinito.
Mas Info:
En la web del Club Murcia Gourmet