

El Reloj de Cuco es un restaurante relativamente jovén (data del año 2005) pero que se ha ganado un puesto en el circuito de restaurantes habituales del la ciudad de Murcia. Se trata de un pequeño restaurante que guarda en su interior un extenso saber de vinos, unas tapas de muy alta calidad, unos platos con productos de mercado y sobre todo permite a sus clientes disfrutar del patrimonio histórico-artístico al tiempo que de una buena mesa ya que el salón está integrado en unos baños árabes del siglo XII.



En cuanto a los platos que pudimos disfrutar, la velada fue abierta con un entretenimiento de embutidos de chato murciano, donde tenemos que destacar por sorprendernos gratamente y a la vez por poco conocida a la Peregila. Embutido realizado con tocino y carne de chato murciano, peregil, huevo cocido y especies. Continuando con un Vasito de salmorejo con mozzarella y boquerón que resultó particular con un salmorejo muy bien hecho y una arriesgada brocheta de queso mozzarella con boquerón de sabor acido y de textura dificil de definir. Para terminar triangulando los tres primeros entrantes una notable, sabrosísima y bien conjuntada Alcachofa Rellena de Pastel de Cabracho con Huevas de Salmón que sin duda recomendamos.
Punto y aparte el fantástico y bien traido Foie Micuit con Pimienta Rosa y Bizcocho de hierbas, que además de sorprender por la calidad de producto, subrayar que es facilmente diferenciable y dificil de olvidar por la aportación al sabor de la pimienta rosa y el original acompañamiento del bizcocho de hierbas.
Si los entrantes resultaron interesantes, los platos fuertes también hicieron su trabajo. Como respresentante del mar Átun al estilo de Barbate y Ajobloanco de Pistachos, hecho en mateca de cerdo ibérico y especiado. Contiuamos con uno de los emblemas del restaurante, Pastel de Hojaldre Murciano con Confit de Pato, una interpretación muy particular del popular tentempie murciano donde se ha puesto más creatividad en el relleno y han dejado lo que realmente gusta, el crujiente hojaldre. Para finalizar dos platos con interpretación propia, una suave Croqueta de morteruelo manchego a la que potenciaba el acompañamiento de la tierra de boletus con almendras y una sobresaliente Carrillera de Cerdo Confitada en Grasa de Pato.
Como representante del postre, una sorprendente Cremè Brûlee de Frutos Rojos con helado de nata y una reducción de vinagre de módena que ajustaba los sabores con precisión suiza.
El maridage estuvo a la altura de la reputación de local ya que uno de sus puntos fuertes es la bodega en cuanto a referencias y calidad de las mismas.
Tenemos que recomendar La Alcachofa Rellena de Pastel de Cabracho con Huevas de Salmón y El Pastel de Hojaldre Murciano con Confit de Pato. Siempre acompañado de cualquiera de los vinos disponibles. Déjese aconsejar por su responsable Javier Torralba.